Homenaje a dos Ex presidentes Fabio Tobón y Thomas Bausch

Mientras iniciamos este VIII Congreso de la Unión Mundial, parece apropiado tener en consideración a los dos hombres para quienes significó tanto.

Fabio Tobón, un ex presidente de la Unión Mundial desde 1997 a 2003, que era el presidente del comité organizador de este Congreso Mundial que está teniendo lugar aquí sobre su territorio y Tom Bausch que hubiera sido el presidente de este Congreso marcando el fin de su mandato de cuatro años como Presidente de la Unión Mundial desde 2009 hasta ahora.

Estos dos grandes líderes fueron en muchas formas personas modestas que asumieron el rol de presidente porque supieron ser las personas indicadas en el momento indicado y ambas antepusieron la Unión Mundial a sus lealtades locales. Fabio asumió el cargo de presidente de John Bowie que fue responsable de separar el rol del presidente de ser el organizador del siguiente Congreso del manejo de la Unión Mundial. Esto le permitió a Fabio, cuando asumió, a concentrarse en actualizar a la Unión Mundial y por primera vez asegurar que aquellas personas que se presentaban para elección al Consejo de la Unión Mundial se diesen cuenta que ellos tenían una responsabilidad y no estaban allí sólo por la gloria. Fabio asignó trabajo a cada miembro del Consejo y constantemente alentaba a cada miembro para completarlo e informar luego sobre qué habían hecho. El se aseguró que hubiera un vínculo constante con la Compañía coordinando a través del delegado del Padre General (en ese tiempo el P. Duminuco SJ), que se reuniría con él al menos una vez al año para discutir el trabajo de la Unión Mundial y cómo éste encuadraba con los objetivos de la Compañía. Como su vice-presidente yo fui incluido en esas reuniones y puedo atestiguar por la cantidad de bien que Fabio alcanzó de ellas.

Siempre salimos inspirados de la información del Padre General y del interés que mostraba en el trabajo de los exalumnos Jesuitas.

Estas reuniones llevaron al histórico encuentro en Roma donde el Consejo se reunió por primera vez entre Congresos y luego de varios días produjo los estatutos de la Unión Mundial. Este fue, tal vez, el más grande logro de Fabio durante su tiempo como presidente. Aquello y el trabajo que hizo de continuar la labor de John Bowie de difundir el conocimiento de la Unión Mundial a una mayor y más extendida audiencia.

Cuando Tom asumió la presidencia en Bujumbura, Burundi en 2009, el trajo un nuevo método. El continuó el trabajo de asegurar que el Consejo de la Unión Mundial debía reunirse tan regularmente como fuera posible pero también introdujo, con la ayuda de su vice-presidente, alguna moderna tecnología de tal forma que aquellos que no pudieran estar presentes físicamente pudieran aún participar a través de la facilidad de conferencias telefónicas. El fue también responsable de aumentar el conocimiento de la Unión Mundial en Norteamérica, una tarea que había comenzado aún antes de ser presidente.
Mi más prevaleciente recuerdo de Tom fue su absoluta paciencia. No importaba si las cosas iban de acuerdo con lo planeado o no, el lentamente guiaba para que los objetivos fueran siempre alcanzados. Durante mi propia presidencia puedo recordar su aliento cuando las cosas no iban como yo había esperado y el consejo que el fue capaz de darme por su amplia experiencia del mundo. Consejo que nunca fue impuesto a uno sino dado libremente cuando fue solicitado. Tom fue realmente un verdadero Ignaciano, un hombre para los demás, y esto fue exhibido no sólo en su trabajo con la Unión Mundial sino también con sus otros compromisos voluntarios y profesionales.

He extraído el siguiente texto (con algunos cambios menores) del sitio web de la Universidad de Marquette donde Tom fue Decano Emérito. Tom fue Decano del College desde 1978 a 1993 y continuó enseñando como profesor de management en Marquette hasta 2010. El fue un ávido proponente de la enseñanza social Católica en negocios y management y tuvo una distinguida carrera centrada en trabajar con universidades Jesuitas y la Compañía de Jesús a lo largo del mundo. Entre muchas otras posiciones de liderazgo Tom fue también presidente de la Asociación para Promover Escuelas de Negocios colegiadas, co fundador y director ejecutivo de la Asociación Internacional de Escuelas de Negocios Jesuitas y presidente nacional de Comunidad de Vida Cristiana. A pesar de todos estos compromisos, la real pasión de Tom en su vida era su familia y yo tuve el placer de estar con el y Bernardine, Bernie, en 2008. Como uno de sus hijos, Peter, dijo: “Mi papá quería que cada uno disfrutara de la vida como el lo hizo”

En este triste momento para la Unión Mundial, nuestro más grande reconocimiento de gratitud a estos dos hombres será hacer de este Congreso el suceso para el cual ambos trabajaron y dar gracias al Señor por ellos. Al mismo tiempo nuestros pensamientos y plegarias deben ir con sus familias que han perdido a dos encantadoras personas.

Similar Posts